16 julio 2010
Crece hasta un 400% los adictos a los analgésicos en EE.UU

Según los datos publicados por la Casa Blanca, los «adictos de farmacia» no son exactamente un problema limitado a celebridades con recursos y conexiones, ya que su grave impacto no hace muchas distinciones de edad, género, raza, grupo étnico, nivel de educación, empleo o zona de residencia, hasta el punto de constituir en estos momentos una de las más graves amenazas para la salud pública americana.


De acuerdo a los datos reunidos por las autoridades federales, Estados Unidos ha visto en una década cómo se ha cuadruplicado el número de adictos a los analgésicos que han llegado a requerir de tratamientos especiales para superar su nociva dependencia. De todas las admisiones para tratamientos de desintoxicación, el porcentaje ha pasado de un 2,2 % en 1998 a un a un 9,8 % en el 2008.

Las cifras de la Administración también reflejan el impacto que esta plaga está teniendo en los servicios de urgencia hospitalarios. Durante el periodo entre el 2004 y el 2008 se han duplicado los ingresos de emergencia relacionados con el uso no autorizado de narcóticos, con el consiguiente aumento en el número de sobredosis.

A juicio de Michele Leonhart, la responsable en funciones de la DEA (Drug Enforcement Administration), los datos del estudio dado a conocer en Washington son alarmantes y reflejan el tremendo daño causado por el abuso de fármacos con receta que ocurre todos los días por todo nuestro país. Como parte de la estrategia nacional anti-droga publicada en mayo por la Administración, la DEA considera esencial luchar contra el negocio de farmacias ilegales y cuestionables clínicas especializadas en el tratamiento del dolor, además de facilitar la eliminación de las dosis sobrantes de legítimas recetas.