05 enero 2009
ENCOD propone cambios en el Plan de Acción de la UE en materia de drogas para 2009 – 2012 propuesto por la Comisión Europea

ENCOD (European Coalition for Just and Effective Drug Policies), propone a los gobiernos de la Unión Europea que adopten un plan de
acción en materia de drogas que proteja a la salud y la seguridad de la
sociedad europea en lugar de empeorarlas. Los ciudadanos y ciudadanas
de Europa necesitamos estrategias que contribuyan a un ambiente más
seguro en torno al fenómeno de las drogas, que hagan posible un uso más
racional de los gastos públicos, que respeten a los derechos humanos,
tomen en cuenta las implicaciones para poblaciones vulnerables y
especialmente mujeres, y que no pongan en riesgo la subsistencia de
productores campesinos en países en vías de desarrollo


ENCOD ha remitido a las autoridades de la Unión Europea la siguiente carta:

A los miembros del Grupo Horizontal de Drogas de la UE

A los miembros de la Comisión de Libertades Civiles, Interior y Justicia del Parlamento Europeo

REF: COMENTARIO DE ENCOD AL PLAN DE ACCIÓN DE LA UNIÓN EUROPEA EN MATERIA DE LUCHA CONTRA LA DROGA 2009-2012

Amberes, 15 de diciembre de 2008

Estimados señoras y señores:

Por
la presente les mandamos la comunicación de la Coalición Europea por
Políticas de Drogas Justas y Eficaces (ENCOD) sobre el nuevo Plan de
Acción de la UE en materia de drogas para 2009 – 2012, propuesto por la
Comisión Europea para su aprobación por los Estados Miembros y el
Parlamento Europeo.

Esperando su respuesta y saludándoles muy atentamente,

A nombre de ENCOD, (red pan-europea de más de 150
organizaciones y ciudadanos individuales involucrados en el fenómeno de
las drogas)

André Fürst, Suiza

Jan Ludewig, Alemania

Virginia Montañes, España

Joep Oomen, Bélgica

Freek Polak, Holanda

Alessandra Viazzi, Italia

(miembros del Comité Ejecutivo)


INTRODUCCION

Proponemos a los gobiernos de la Unión Europea que
adopten un plan de acción en materia de drogas que proteja a la salud y
la seguridad de la sociedad europea en lugar de empeorarlas. Los
ciudadanos y ciudadanas de Europa necesitamos estrategias que
contribuyan a un ambiente más seguro en torno al fenómeno de las
drogas, que hagan posible un uso más racional de los gastos públicos,
que respeten a los derechos humanos, tomen en cuenta las implicaciones
para poblaciones vulnerables y especialmente mujeres, y que no pongan
en riesgo la subsistencia de productores campesinos en países en vías
de desarrollo.

En breve una política de drogas que aporta beneficios a la sociedad en lugar de daños.

Este nuevo plan de acción debería incluir las siguientes prioridades:

1. INFORMACIÓN, INVESTIGACIÓN Y EVALUACIÓN

- Fomentar
la investigación y ampliar la base de conocimientos sobre las formas en
las que los consumidores de drogas pueden intervenir directamente para
reducir riesgos y daños relacionados con su propio consumo.

- Investigar
y evaluar las estrategias, programas e intervenciones innovadoras en
materia de política de drogas, incluídos los tratamientos alternativos
como la distribución controlada de sustancias.

- Fomentar la participación de las organizaciones de personas usuarias de drogas en el diseño y desarrollo de las investigaciones

- Tener presente la perspectiva de género en las investigaciones y evaluaciones.

- Garantizar
el análisis objetivo de los datos que se obtienen como resultado de las
investigaciones, sin manipulaciones políticas.

- Promover
workshops internacionales que fomenten el flujo de información e
intercambio de experiencias entre los distintos grupos de personas
afectadas por las drogas, según su complejidad y la de la sustancia.

- Investigar
los vínculos entre la industria de las drogas legales (alcohol,
empresas farmacéuticas, tabaco, etc.) y las instituciones de la salud.

2. COORDINACION

- Facilitar
la descentralización de las políticas de drogas en los niveles local y
nacional, y coordinar el trabajo conjunto entre países y regiones
fronterizas para evitar eventuales desajustes.

- Defender
ante la ONU la soberanía de cada Estado para establecer formas de
regulación del mercado de las drogas que sean social y culturalmente
aceptables para las poblaciones locales involucradas.

- Permitir
un margen más amplio a las autoridades locales para experimentar con
estrategias alternativas e intervenciones innovadoras (que puedan
incluir pasos hacia la regulación de ciertas sustancias), de las que
otros puedan extraer aprendizajes útiles en su búsqueda hacia políticas
más justas y eficaces, que estén basadas en el respeto a los derechos
humanos y la protección de la salud.

- Incrementar y fortalecer la participación de la sociedad civil en el diseño de las políticas de drogas.

- Ampliar
la membresía del Foro de la Sociedad Civil sobre Drogas a todas las
organizaciones que soliciten participar en el mismo.

- Formalizar
el carácter de las conclusiones de este foro como una consulta directa
de la sociedad civil a los Estados Miembros, sin interferencia
innecesaria de la Comisión Europea en la formulación de conclusiones y
recomendaciones de este foro.

3. REDUCCIÓN DE LA OFERTA.

- Racionalizar la oferta de drogas y reducir al máximo la criminalidad asociada al mercado negro con medidas eficaces.

- Facilitar,
analizar y evaluar el establecimiento de circuitos legales para
controlar el mercado de las drogas con el fin de reducir la presencia
del mercado ilegal.

4. REDUCCIÓN DE LA DEMANDA.

- Reducir
los problemas asociados a un consumo de drogas realizado en un contexto
de ilegalidad; mejorar, innovar y apoyar las estrategias para
responsabilizar a consumidores y distribuidores (entre otros mediante
iniciativas como el análisis de sustancias ilegales).

- Facilitar
y fomentar la creación de grupos de auto apoyo de personas
consumidoras, para desarrollar métodos de intervención más eficaces
enfocados a la reducción de riesgos y daños asociados al uso de
sustancias.

- Fomentar
el desarrollo de grupos de autoayuda formados por pares de iguales
(padres, jóvenes, personas consumidoras, etc.) y apoyar las
contribuciones de este tipo de grupos.

Limitar la intervención institucional exclusivamente al
uso problemático entendido como aquel que la propia persona consumidora
considera como tal, y limitarla a medidas no-represivas.

- Fomentar y respetar el cumplimiento de códigos éticos para la publicidad y promoción de drogas lícitas o ilícitas.

- Dar
atención específica a los grupos vulnerables, como madres consumidoras,
especialmente a los menores de edad en situación de alto riesgo;
aplicar políticas de prevención dirigidas a la creación de “barrios
preventivos”, orientados a la disminución de la marginalidad y la
exclusión social en la que viven estos grupos vulnerables.

5. COOPERACIÓN INTERNACIONAL.

- Respetar
la soberanía de los países terceros y su autonomía para formular
políticas de drogas propias. El principio de la política europea debe
ser la protección a la salud, el respeto a los derechos humanos y la
prevención de conflictos.

- Fomentar
las propuestas de las comunidades productoras en países en vías de
desarrollo sobre la creación de canales de comercialización de los
productos derivados de las plantas que han sido prohibidas por las
convenciones de la ONU, tales como la hoja de coca en Sudamérica, el
cannabis en Marruecos y el opio en Afganistán.

- Fomentar
el intercambio de experiencias de buenas prácticas entre los países de
la Unión Europea y países terceros, basado en el respeto a la soberanía
de los países y evitando la imposición de modelos cuya ineficacia haya
sido demostrada.