26 octubre 2010
Una de cada cuatro personas que prueba la heroína se vuelve adicta

La heroína es muy adictiva. De hecho, una de cada cuatro personas que la prueba se vuelve adicta. Esta droga la consume o ha consumido alguna vez el 0,8% de la población española. Así lo explicó la delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas (PNSD), Carmen Moya, durante la presentación del Informe sobre Heroína elaborado por la Comisión Clínica del PNSD.


Los últimos datos reflejan que ha aumentado el grupo de personas que la ha consumido en los últimos 30 días, del 0% al 0,1%, además de que el 77% de los españoles que la han probado afirman que la consumió por vía intrapulmonar.

La delegada del Gobierno recordó que la producción de opio se mantiene en el mundo (el 89% procede de Afganistán), las rutas de entrada de la droga en España están «establecidas» (especialmente desde Países Bajos y Alemania) y el número de consumidores de heroína se ha incrementado una décima en el último año.

En concreto, los datos procedentes de las últimas encuestas nacionales realizadas por el PNSD reflejan que, en 2007 y 2008, el 0,8% de la población de 15 a 64 años señaló haber probado esta sustancia alguna vez en la vida, el 0,1% la había consumido en los últimos 12 meses, y el 0,1% en los últimos 30 días (el único grupo que sube, del 0% al 0,1%).

Respecto a la edad media de inicio en el consumo de esta droga, se ha pasado de los 20,3 años de 1995 a los 21,7 de la última encuesta, dato que sitúa a la heroína como la droga ilegal de inicio más tardío, sólo por detrás de los hipnosedantes. En este sentido, entre los escolares de 14 a 18 años, el 0,9% ha probado esta droga alguna vez en la vida y el 0,7% lo ha hecho en los últimos 12 meses, según el informe del PNSD.

Por otra parte, entre 1995 y 2007, ha disminuido la visibilidad del consumo de drogas en general, aunque este descenso se observa fundamentalmente en todo lo relacionado al uso inyectado de drogas. La proporción de personas que encuentra jeringuillas tiradas en el suelo o personas inyectándose drogas ha pasado del 17,3% en 1995 al 4,2% en 2007 y de 10,7 al 2,8%, respectivamente.

También ha disminuido de forma importante la población que señala haberse encontrado con drogodependientes «tirados en el suelo» (al pasar de un 12,3% en 1995 a un 5,6% en 2007), o con personas inhalando drogas en papel de aluminio, que ha pasado de un 10,6 a un 4,6%.

Sin embargo, «el problema de la heroína no ha desaparecido en España», subraya Moya. «Sí que han cambiado las vías de administración», señala, ya que el 77% de la heroína consumida se realiza por vía intrapulmonar (fumada), mientras que la vía intravenosa ha descendido hasta el 12%. Para el presidente de Socidrogalcohol y miembro de la Comisión que ha elaborado este informe, Julio Bobes, el perfil del consumidor de heroína en España ha cambiado, ya que la mayoría de personas adictas a esta sustancia lo son también a otras drogas como la cocaína, el cannabis, el alcohol y el tabaco.

«Los consumidores son menos fieles a la heroína que en los años 80 y ahora la combinan con otras sustancias», comenta.

El informe destaca que, en Europa, la heroína es la principal droga por la que se solicita tratamiento, con un 49% de las 325.000 demandas de atención médica en 2007.

En cambio, en España, que a nivel mundial se sitúa en el puesto 99 dentro del ranking de países consumidores, las admisiones a tratamiento por heroína han descendido «de forma importante» en los últimos años, «debido sobre todo a la caída de los admitidos a tratamiento por primera vez en la vida».

En este sentido, la heroína dejó de ser la primera sustancia que motivaba la admisión a tratamiento y en su lugar, es la cocaína la que más demanda genera (46,4%). La edad media de admisión a tratamiento por consumo de heroína, apunta a un «envejecimiento» de los usuarios, siendo 37,5 años en 2008.

Para, Carlos Álvarez, representante de la Comisión Clínica encargada de elaborar el informe, estos datos reflejan que «la epidemia de heroína que sufrió España en los años 70 y 80 todavía colea». De hecho, el «repunte» del 0,1% en el último mes «podría achacarse a los consumidores de cocaína que después del fin de semana recurren a la heroína para frenar los efectos estimulantes de esta droga y poder acudir a trabajar el lunes».