La situación en los países del Este de Europa es similar a la que se vivió en España hace 20 años, por lo que las medidas aplicadas en nuestro país se han expuesto en la reunión como modelo.
Tomás Hernández, secretario del Plan Nacional del Sida, ha explicado que hace dos décadas se tomaron medidas con la finalidad de reducir el número de seropositivos drogodependientes en las cárceles. Se administraron jeringuillas para evitar que se compartiesen y se realizaron programas de metadona. Así, se redujo el número de contagios.
Hernández ha dicho que es importante mantener la contribución de España al Fondo Mundial de la Lucha contra el Sida, que a su juicio es muy generosa. Además, ha recordado las palabras que ha pronunciado Bill Clinton, ex presidente de Estados Unidos, durante la conferencia, cuando comentó que en tiempos de crisis hay que trabajar rápido, más barato y eficiente, que resume cómo hay que trabajar ahora.
El Plan Nacional del Sida tiene ahora como retos terminar con la estigmatización de los seropositivos, acabar con el retraso diagnóstico – que dificulta la instauración precoz de tratamiento-, prestar especial atención a la transmisión entre homoxesuales y mantener los tratamientos eficaces aunque sean caros.
